Pese a que se conocen desde hace años los beneficios que brinda la lactancia materna, también existen varios mitos sobre este comportamiento que deben ser desmentidos. Entre los más comunes, que son completamente erróneos, se encuentran: la lactancia materna es más fácil; amamantar duele; se deben lavar los pezones para amamantar; hay que separar al binomio para que la madre descanse y se recupere; el ejercicio es contraproducente para amamantar; se deben comer alimentos sencillos; si no se prende de inmediato al nacimiento será más dificultoso; nunca hay que usar fórmula si se quiere amamantar; muchas madres no pueden producir suficiente leche; no se debe amamantar si se está enferma; no se puede ingerir ningún medicamento durante la lactancia; los bebés que son amamantados son más apegados; es difícil destetar si se amamanta más de un año; si se retoma el trabajo se deberá destetar.
“Debemos tener en claro que la lactancia materna es una responsabilidad compartida que involucra no sólo a la madre y su recién nacido, sino también a la familia, el entorno social y el ámbito laboral”, aseguró Conde Ocampos, al tiempo que advirtió que existen dos problemas. Por un lado, la OMS recomienda la “lactancia materna exclusiva”, la cual no puede ser garantizada si la mujer debe retomar una vida laboral que le brinde su independencia y autonomía. Por el otro, recordó que existen mujeres que, en su pleno derecho, no sienten el deseo de amamantar o no tienen la posibilidad, ya sea física o emocional, de hacerlo.
N Digital Multimedia / AGOSTO 2, 2022
“Debemos tener en claro que la lactancia materna es una responsabilidad compartida que involucra no sólo a la madre y su recién nacido, sino también a la familia, el entorno social y el ámbito laboral”, aseguró Conde Ocampos, al tiempo que advirtió que existen dos problemas. Por un lado, la OMS recomienda la “lactancia materna exclusiva”.